La compañía aérea española Iberia ha notificado al sindicato TCOs Sitcp la apertura formal de un nuevo ERE voluntario (Expediente de Regulación de empleo), y que según difunde el sindicato en un comunicado “podría afectar hasta un máximo de 960 trabajadores de la compañía, una cifra que la dirección no desglosa por colectivos”.
La decisión de la compañía, que ya fue anunciada el año pasado por su presidente ejecutivo Luis Gallego, se materializa ahora por razones “técnicas, organizativas y productivas”, indicando que el ERE “es voluntario y está abierto a todos los colectivos”, aunque en el comunicado de hace un año se indicara que afectaría principalmente al área de mantenimiento, oficinas centrales y, en menor medida, al handling y tripulantes de cabina de pasajeros (TCP).
Este es el tercer ERE de la compañía desde la mediación firmada en marzo de 2013 -debido al plan de reestructuración de la compañía tras su entrada en el grupo IAG en 2011 (fusión de la aerolínea con British Airways)-, y con el que se pretende “tener una plantilla acorde con la producción actual”, en un contexto en el que los beneficios de la empresa alcanzaron el año pasado los 271 millones.
A partir de ahora y en unos días, los sindicatos tienen que decidir si la negociación se realizará mediante los representantes unitarios o las secciones sindicales, para después constituir la comisión de la mesa única negociadora, con un máximo de 13 miembros que representarán los intereses de todos los trabajadores de la empresa.