La compañía aérea British Airways aún no ha podido restablecer sus servicios en la totalidad desde que el pasado sábado sufriera una caída en su sistema informático que le obligó a cancelar todos los vuelos en los aeropuertos londinenses Heathrow y Gatwick, provocando un enorme caos no sólo en estos aeropuertos, sino también en el resto del mundo con multitud de vuelos cancelados, retrasados y pérdidas de equipaje. Según los sindicatos de la compañía, éstos atribuyen el fallo a la subcontratación y trasladado a la India de los empleos del departamento de informática para reducir costes. Por su parte, la compañía desmiente esta acusación y atribuye el fallo a un corte eléctrico que desencadenó un fallo en cascada en su sistema informático global, a la par que descarta la acción de un ciberataque.
Los usuarios afectados por este problema son miles debido a que British Airways es una de las compañías aéreas más grandes del mundo. Además, el fallo afecta también a vuelos de su filial BA Cityflyer, e indirectamente a algunos vuelos derivados de su alianza Oneworld y el grupo hispano-británico IAG (que incluye a las aerolíneas españolas Iberia y Vueling, y a la irlandesa Aer Lingus). En Inglaterra el fallo ha coincidido con una semana de vacaciones escolares y un fin de semana con lunes festivo, es decir, uno de los fines de semana de más tráfico aéreo del año.
British Airways ha comunicado que espera volver a la normalidad durante este lunes, y ha prometido que compensará a los afectados por la suspensión o retraso de los vuelos. Los afectados por este incidente también pueden consultar las obligaciones e indemnizaciones a las que están sujetas las compañías aéreas en estas páginas sobre los Derechos del pasajero de avión.